De BLOG ALINEACIONES |
La temporada del regreso fue bastante buena. El Oviedo logra la permanencia con facilidad y encima queda por encima del Gijón (lo que posteriormente sería cosa habitual), en un excelente doceavo puesto, con 41 puntos, anotando 48 goles y encajando 35. Con un nuevo presidente, Eugenio Prieto, y el talismán Miera en el banquillo, los azules empezaron la temporada con titubeos en su juego, ya que a veces daba la impresión de que los Berto, Luis Manuel, Viti.. no podían con la división. Pero nada más lejos de la realidad. El momento culmen de la temporada se produjo cuando el Gijón rendía visita al Tartiere. Habían sido trece largos años para volver a jugar el derby, y las ansias de victoria se respiraban en todos los jugadores y aficionados azules. El equipo no decepcionó y un soberbio disparo de Tomás daba un triunfo que daría pié a una sensacional racha de victorias azules sobre los vecinos. Se ficharon jugadores determinantes, y se consiguió la cesión de otros, como Cristobal, que posteriormente pasarían a engrosar el plantel oviedista. El equipo no notó la sensible baja del ariete Carlos Muñoz, que volvería el año siguiente tras las muestras de cariño que le propesó el público cuando visitó el Tartiere con el Atlético de Madrid, en el que fue el mejor partido del año.
No hay comentarios:
Publicar un comentario